miércoles, 2 de julio de 2014

El limón: fuente de múltiples e increíbles beneficios

El limón, esa fruta amarilla que da color a nuestros platos y un toque de sabor  muy característico a nuestros alimentos, es un fuente de múltiples propiedades, muchas de ellas desconocidas.
El limón es alcalinizante, antioxidante, antibacteriano, antiviral, antifúngico, analgésico, anticancerígeno, astringente, antihistaminínico, antipirético, cardioprotector, desintoxicante, diurético, antihemorrágico, estimulante del hígado y del páncreas, expectorante, hidratante, hipocolesterolemiante, hipotensor e inmunoestimulante. Increible, ¿verdad?


Cien gramos, que sería el equivalente de 2 limones medianos aproximadamente, proporcionan 29 calorías, 1.1 gramos de proteínas, 0.3 gramos de grasa, 9.3 gramos de hidratos de carbono, 2.8 gramos de fibra y 2.5 gramos de azúcares naturales.
Los limones son una excelente fuente de vitamina C, de vitamina B6, potasio, ácido fólico, flavonoides, limonoide y limoneno.
El limoneno, es un fitoquímico que se está estudiando actualmente en distintos ensayos clínicos para disolver cálculos, mostrando además una potente actividad anticancerígena.
Los flavonoides limitan la acción de los radicales libres, ya que son antioxidantes. Entre sus acciones se encuentra aumentar la actividad de la vitamian C, evitar los sofocos en la menopausia, ayudar en los casos de gastritis y alergias, bloquear la progresión de las cataratas y la degeneración macular y, sobre todo, reducir el riesgo de padecer cáncer. También tienen acción antiviral y antiinflamatoria, y reducen los niveles de colesterol.
Los limonoides también tienen acción anticancerígena, y además, según estudios recientes, también ayudan a reducir el colesterol y tienen actividad antiviral. Para haceros una idea de su potencial, en un estudio elaborado en el 2011 por la Universidad Europea de Texas, se sugiere la idea de que los limonoides tienen una acción antitumoral en el caso del cáncer de mama mayor que el tamoxifeno, fármaco de primera linea hoy por hoy en el tratamiento de este cáncer.
Los carotenoides - pigmentos de color como los betacarotenos, los licopenos y la luteína presenten en las frutas y verduras- también ofrecen algo de protección antioxidante pero sobre todo tienen acciones beneficiosas sobre el crecimiento celular y la visión.
El folato es una vitamina necesaria para la síntesis de ADN y por tanto para la integridad del material genético de nuestras células y el crecimiento saludable de los tejidos.


Como véis, son múltiples las propiedades del limón, lo que lo hace un alimento de increible potencial para la prevención de numerosas enfermedades, sobre todo para los enfermos de cáncer. Por ello, una opción muy saludable sería la de incluir este cítrico en nuestra alimentación diaria.
Una idea. Para realizar una desintoxicación de nuestro organismo con esta fruta podemos tomar un zumo de limón diluido en agua ingerido en ayunas durante dos semanas. De la siguiente manera: echar el primer día el zumo de un limón en un vaso, rellenando el resto con agua, y beberlo. Mejor con una pajita para que el líquido no entre en contacto en exceso con el esmalte dental. El segundo día usa el jugo de dos limones, el tercero tres y sigue con esos tres hasta llegar al décimo tercer día, que se debe bajar a dos limones y el último a uno. Se puede repetir la limpieza cada 6 meses.
En cualquier caso el limón también puede usarse para aliñar las ensaladas, pescados, mariscos, para hacer helados, limonadas... ¡lo que se os ocurra! Lo importante es añadirlo en nuestra alimentación diaria.


Y vosotros, ¿soléis tomar limones? ¿Cómo lo tomáis?